Refugio

Ya casi no escribo.
Será que ya no necesito unir retales para construir un asilo en el que resguardarme.

Hace no mucho, en uno de mis paseos sin rumbo, me tropecé con un refugio.
El refugio que encontré es cálido y seguro y, a pesar de estar blindado a la soledad, tiene grandes ventanales desde los que mirar al horizonte.



Y es que mi refugio es más que eso.

Desde él se ven preciosas imagenes a contraluz que quedan capturadas dentro.
Así, el refugio se va llenando poco a poco de vida, y cada mañana va pareciendo más un hogar y menos un refugio.



Cada mañana despierto con una sonrisa.



Pero eso no es culpa del refugio, sino de quien lo comparte conmigo y hace que todos los días se llenen de luz.



[d(º-º)b Sonando: Another Sunny Day, Belle and Sebastian]

Ya no II.

Ya no. Ya no tendré que sudar más tinta por temarios imposibles, ni pasar más noches de nervios pre-examen, ni esperar ansiosamente listas de notas en la facultad.
Probablemente estudie otras cosas, pero no será así nunca más.
Y es que tras tantos años de esfuerzos, aprobé el último.
Al margen de extras boloñeses, me siento casi casi graduada; toquemos madera.

Ahora todo va a cambiar. De hecho, todo ha empezado a cambiar ya.
La nueva vida comenzó hace cuatro meses, pero estoy encantada de seguir estrenándola cada día.

Encantada con mi nuevo papel como mujer adulta. Suena presuntuoso y asusta, pero hoy me da lo mismo.
Feliz con mi nueva compañía. Tal vez feliz sea decir poco.
Contenta de seguir teniendo a los antiguos apoyos, sin los cuales habría sido imposible, y rezando porque eso no cambie.


Agarrando el momento con las manos, los pies, los dientes y el alma.
Y deseando que no me suelten.





I'm free to be whatever I
Whatever I choose
And I'll sing the blues if I want

Ya no

No tengo ganas, ni fuerzas para más excesos académicos.

Tras tantos junios de sacrificio, este año no puedo (aunque sé que debo) encerrarme en oscuras bibliotecas ni pasar sueño por estar entre los libros.

Ya no. Mis dioptrías son mías.

Huele a verano, y no hay nada que inspire más a ser feliz que el olor a verano y las noches de luna. Floto por la calle y sonrío yendo a trabajar.

Tres días escasos.

Gira

Todo gira a mi alrededor.
Gira y gira.
Gira tan deprisa que pierdo la visión por un momento.

Cuando abro los ojos me veo tumbada de espaldas en una hierba verdísima, con los ojos puestos en las nubes sobre un fondo azul brillante.

Qué complicación.

que se te pare el corazón.





Arteria carótida, válvula mitral, el cayado aórtico, septo intraventrícular, vávula tricúspide, aurícula derecha, aorta descendente, arteria subclavia izquierda...oOOOoO yEEEeeeh...

Estudiando arritmias.
Muerta de sueño y de asco.



Pero me vengaré durmiendo mucho y siendo feliz todo el rato.
Siendo feliz sin mirar el reloj.